El expresidente de la república, Mauricio Funes, asilado en Nicaragua dijo que la nueva acusación que la Fiscalía General de la República le hace es porque no han logrado capturarlo, tras la acusación de lavado de dinero por $351 millones.


“No hay que ser muy suspicaz para saber qué esconde esta nueva acusación: El fiscal no ha logrado que Interpol me capture y tampoco lo de mi extradición. Y es que el caso en mi contra además de débil es político. Tiene que montar otro caso para ver sí esta vez se pone una medalla”, escribió ayer en su cuenta de Twitter.


El exmandatario señaló que la Fiscalía no mostró pruebas a los medios de comunicación, que él haya dado vehículos al exfiscal Luis Martínez, como lo aseguró el actual fiscal general, Douglas Meléndez.


Por el contrario, Funes reclamó que la Fiscalía no ha mostrado resultados de la investigación de sobresueldos otorgados a más de 50 exfuncionarios de la administración de Antonio Saca. “Como presentó un caso débil de corrupción en mi contra, hoy el Fiscal anda desesperado en ver en qué otro caso me mete”, escribió Funes.